Aparecí, por casualidad, en Marruecos hace más de 10 años. Sin otro propósito que conocer parte del país, algo de su cultura y sus tradiciones y disfrutar de unas maravillosas vacaciones familiares.
Marruecos enamora y atrapa. Año tras año repetía destino, hay demasiadas cosas para ver, este es un país de constantes contrastes.
Hace ya 2 años que vivo en Marrakech.
Cansada de la vida que llevaba en España, siempre correteando de un sitio a otro y pegada al reloj, sin tiempo para nada.
Sentía la necesidad de salir de mi zona de confort y cambiar de aire, de volver a empezar de cero.
Aparecimos mi madre y yo aquí, en Marrakech (la capital turística del país). Tras 4 años de continuos viajes en busca del riad perfecto, de valorar el cambio drástico de vida... todo se materializó. Tenemos un riad precioso en mitad de la medina de Marrakech. No voy a decir que todo ha sido fácil, porque estaría mintiendo, pero desde luego que ha merecido la pena. Vivo muy a gusto en mi país de acogida, adaptándome a vivir de forma diferente y apreciando cada pequeño momento.
Como seguramente dirían mis nuevos amigos bereberes, en España tenemos reloj y en Marruecos el tiempo, cosa que a día de hoy soy consciente de la importancia de tener tiempo. El tiempo es algo que ni con todo el dinero del mundo puedes comprar, pasa rápido, no avisa y no vuelve. Es algo valioso para regalar a las personas que te importan.
El idea de materializar este blog, empezó a rondar en mi cabeza hace meses, más de una forma personal que otra cosa.
Necesito otro cambio pero esta vez no tan drástico, más que un cambio quizás sea un paso adelante. Hasta ahora he seguido conectada de un modo u otro a mi zona de confort (en España ya trabajaba en un hotel), ahora quiero dar un paso más, ver si soy capaz de transmitir ese amor que siento hacia Marruecos, contagiar a los viajeros de ese sentimiento y enseñarles desde mi visión de extranjera cómo es la vida aquí, la posibilidad de mezclarse entre las personas y poder conocer de primera mano parte de sus costumbres y forma de vida, a veces tan similar y otras a años luz de distancia. Es algo tan mágico como atrayente.
Me resulta imposible decir con palabras lo que Marruecos me ha regalado y explicar por qué estoy tan a gusto aquí. Simplemente el país me enamoró.
Esta es mi vida, son mis pensamientos y son mis sentimientos.
www.riadazconamarrakech.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario